7 enfermedades en salmones causadas por bacterias
29 abril 2022
El agua es un medio favorable para la proliferación de bacterias. Por esto, debe haber una preocupación especial con el control de estos agentes en la acuicultura. La salmonicultura puede verse afectada por diversas enfermedades bacterianas que comprometen la salud de los peces y la productividad. Hablamos con el médico veterinario y especialista en Enfermedades de Salmónidos Sergio Vásquez, quien hizo una lista de siete enfermedades de salmón causadas por bacterias que merecen atención.
Las principales enfermedades en salmones causadas por bacterias
Varios agentes patógenos causan enfermedades en peces y deben controlarse, sin embargo, las bacterias son más relevantes puesto que representan uno de los principales riesgos para el segundo productor de salmón en el mundo, en Chile. «El efecto perjudicial de las enfermedades bacterianas se refleja en peces enfermos en diversos grados: los que disminuyen su apetito o dejan de comer, lesiones en órganos externos e internos, los que pueden resultar en septicemia y muerte de los peces. Esto tiene un efecto negativo, puesto que reduce la población en cultivo, lo cual genera una seria pérdida económica del lote afectado», afirma el especialista en enfermedades de salmónidos.
El médico veterinario detalla siete de las principales enfermedades causadas por bacterias que afectan a los salmones:
- Septicemia Rickettsial Salmonídea (SRS):
Causada por la bacteria Piscirickettsia salmonis, la Septicemia Rickettsial Salmonídea (SRS) es altamente infecciosa en la etapa de agua de mar en el cultivo de salmón, pero no sobrevive en agua dulce. La infección es multisistémica y causa lesiones en la piel y en los órganos internos. Esta enfermedad es una de las principales causas de mortalidad en la salmonicultura, en Chile.
- Enfermedad bacteriana del riñón en salmónidos (BKD):
El agente de esta enfermedad es la Renibacterium salmoninarum. Se presenta tanto en agua dulce como salada cuando la temperatura está por debajo de los 10 ºC. «En casos avanzados, presenta lesiones externas como oscurecimiento de la piel, escamas erizadas y exoftalmia. Internamente, el riñón es el principal órgano afectado, además el bazo también está comprometido. Si el cuadro avanza a una septicemia, aparecen muchas más lesiones en los órganos internos, las cuales llevan a los peces afectados a la muerte».
- Flavobacteriosis:
La Flavobacterium columnare causa la Flavobacteriosis, una enfermedad muy común en agua dulce. La Flavobacterium psychrophilum, otra bacteria del mismo género, también es un agente etiológico altamente presente en la acuicultura. «Debido a que se trata de dos bacterias diferentes, pero que pertenecen al mismo género, presentan lesiones diferentes y actúan en condiciones ambientales diferentes. F. psychrophilum se presenta cuando el agua está a 12 ºC o menos, es decir, es una enfermedad común en agua fría. En el caso de F. columnare, los brotes aparecen cuando la temperatura del agua supera los 16 ºC. Ambas afectan a los peces tanto externa como internamente, con lesiones en la piel, aletas y branquias. Internamente, afectan el bazo y otros órganos internos, los cuales, al avanzar el cuadro, alcanzan una septicemia que termina en brotes infecciosos de diversos grados».
- Tenacibaculosis:
«Esta es una enfermedad de agua de mar que ha presentado un aumento en su diagnóstico desde el año 2018, cuando los diagnósticos macroscópicos comenzaron a asociarse con los hallazgos de este agente en el laboratorio. Hay varios agentes que pertenecen a este género, entre los cuales se destacan Tenacibaculum dicentrarchi, T. finnmarkiensi y T. maritimum. Las lesiones más notorias son las externas, con lesiones variadas en las aletas y en la piel y con múltiples úlceras, las cuales pueden unirse, abarcando grandes extensiones en la piel y, en casos graves, pueden dejar la musculatura expuesta. Internamente, se ven afectados órganos como hígado y bazo. Estas lesiones llevan a la muerte, ya sea por un desequilibrio osmótico o una condición séptica».
- Furunculosis:
Esta enfermedad, ocurre en agua dulce y salada y es causada por la Aeromonas salmonicida. Felizmente, se ha registrado cada vez menos su presencia debido al éxito de los protocolos de vacunación. «Las lesiones son perceptibles en la piel, como abscesos y úlceras que exponen el tejido muscular. Además de los órganos internos, también se presentan lesiones, principalmente del tipo hemorrágicas».
- Vibriosis:
«El agente causal puede ser Vibrio anguillarum o Vibrio ordalii, bacterias que viven solamente en ambientes marinos. Cualquiera que sea el agente causal, provoca lesiones en la piel como úlceras, abscesos, hemorragias en las aletas y opacidad. Internamente, se observan lesiones hemorrágicas y anemia en órganos como hígado, bazo y riñón. Cada agente causa lesiones diferentes, sin embargo, las más prevalentes son muy similares».
- Yersiniosis:
También conocida como enfermedad o enteritis de la boca roja, es causada por la bacteria Yersinia ruckeri en agua dulce. «Presenta lesiones externas con diferentes grados de congestión en la boca, labios, lengua, paladar y cara interna de los opérculos. También hay exoftalmia y hemorragia alrededor del ojo. En algunos casos se presentan úlceras en la piel. Internamente, se presenta congestión y hemorragias en la superficie del hígado, vejiga natatoria, páncreas y ciegos pilóricos. El bazo aumenta mucho su volumen y se oscurece».
Las enfermedades en salmones de origen bacteriano se deben prevenir, diagnosticar y tratar
A pesar de que la identificación de las señales clínicas es importante, el diagnóstico de las enfermedades bacterianas depende de la confirmación del agente etiológico con pruebas de laboratorio. Solamente conociendo la bacteria causal será posible seguir el tratamiento adecuado para la enfermedad de los peces. «El diagnóstico precoz de las enfermedades exige un gran esfuerzo en la capacitación del personal, en tener médicos veterinarios que estén revisando la mortalidad permanentemente y recolectando muestras para un laboratorio diagnóstico, con el fin de determinar su ausencia o presencia y sus grados de agentes infecciosos. En la medida que sea posible detectar tempranamente la presencia de un agente, se puede iniciar un tratamiento oportuno y las posibilidades de éxito son mayores», aclara el especialista en salmones.
Como las enfermedades bacterianas se tratan con antibióticos, es indispensable que un médico veterinario sea el responsable de diagnosticar y prescribir el tratamiento, ya que hay una gran preocupación con el mal uso de estos medicamentos. El uso indiscriminado de antibióticos es maligno para los costos de la acuicultura y para la salud del pez. Además, involucra el peligro del aumento de la resistencia bacteriana que puede ser transmitida a las personas. Por esto, la acuicultura debe estar enfocada en la prevención de las enfermedades de los peces. Actualmente hay vacunas contra seis de las siete enfermedades bacterianas mencionadas en este artículo, a excepción de la tenacibaculosis, puesto que su vacuna aún está en fase experimental. En el cultivo de salmón se debe seguir el calendario de vacunación recomendado por el médico veterinario para garantizar la salud de los animales y la productividad.
Los cuidados sanitarios evitan la proliferación de bacterias en la cría de salmón
Es importante recordar que el cultivo de salmón simula el ciclo natural del pez y cada etapa (tanto en agua dulce como en el mar) tiene cuidados que se deben seguir para evitar la proliferación de bacterias. «En la acuicultura, el agua, sea dulce o de mar, es un medio que favorece la presencia de bacterias. Esta permite que las bacterias se mantengan activas por más tiempo, independientemente de su temperatura, en comparación con las bacterias en el medio terrestre, que es seco», explica el médico veterinario.
«En una piscicultura en agua dulce y con cultivo en estanques, el agua se puede desinfectar, ya sea con filtros ultravioleta o con ozono, además de instaurar medidas de bioseguridad para evitar el ingreso y la proliferación bacteriana. Por otro lado, si el cultivo es en un medio abierto, como en el caso de los centros de mar, es muy difícil tener el control sobre el medio ambiente. Por esto, para evitar el ingreso de enfermedades bacterianas, se deben aplicar medidas de bioseguridad tales como desinfección de equipos y materiales, limitar el tránsito de personas y embarcaciones de otros centros de cultivo o empresas, entre otras. No hay nada que se pueda hacer para controlar las bacterias que se encuentran en el agua y se transportan por corrientes marinas, otros peces o aves.
De esta forma, se concluye que las enfermedades bacterianas son una constante e importante amenaza para la salmonicultura, causando daños para la salud de los peces y para la producción. Por esto, es fundamental que la acuicultura adopte una postura preventiva, con vacunación y medidas de bioseguridad.
* Sergio Vásquez es graduado en Medicina Veterinaria de la Universidad Austral de Chile y es máster en Medicina Veterinaria con especialización Enfermedades de Salmónidos de la Universidad San Sebastián de Puerto Montt. Tiene más de 30 años de experiencia en la industria chilena de salmón y es Representante de Ventas de MSD Salud Animal.